La banda se formó a principios de los 70 sobre la sólida base que formaron los hermanos Decamps y fue justamente en esa década cuando la formación ofreció sus mejores trabajos, coincidiendo con la mejor época para el rock sinfónico.
Pero Ange tenía algo más, a sus excelentes composiciones sumaba una puesta en escena muy original con una excelsa teatralidad con la que conseguían dar una nueva dimensión a sus canciones. Con esa oferta llegaron a convertirse en una de las bandas de referencia del país vecino.
Con la llegada de los 80 les pasó como a casi todas las formaciones de la rama sinfónica del rock progresivo y entraron en una etapa de decadencia. Un giro a sonoridades más pop, a canciones más aptas para el gran público, con la que perdieron su espíritu innovador de los 70.
Ahora, visto con perspectiva, se puede decir que esto es ley de vida, casi todas las cosas tienen su gran momento y después les llega el declive, pero siempre nos quedará su música de los años dorados, esa ya es inmortal.
Como decía más arriba, de su primera etapa nos han quedado un ramillete de buenos discos que son parte de la historia de la música: Caricatures del año 1972, Le Cementiere des Arlequins del 1973, Au dela du Delire de 1974 o Emile Jacotey del 1975.
Como presentación os propongo la canción Au dela du Delire, del álbum del mismo nombre.
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