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lunes, 22 de mayo de 2017

20 años no son nada: OK Computer

Decía la vieja canción que 20 años no son nada, pero como todo es relativo, para algunas cosas serán muchos y para otras pocos. Para mí, en el caso que nos ocupa, el OK Computer de Radiohead, está claro que son poquísimo.

Que bien ha envejecido este disco, con que solera, como mejora con los años y creo que así será hasta el infinito y más allá.



Volverlo a escuchar es siempre un torbellino de sensaciones, de emociones, experimentar la cuadratura del círculo, la levitación del alma, un viaje astral al fondo de la mente y a la más remota galaxia del universo, si es que existe.

Llegando al final del milenio a las puertas del año 2000, del que tanto se hablaba y con todas las miradas puestas en el nuevo siglo, Radiohead se saca de la chistera esta maravilla para acercarnos un poco más al cambio de era. La banda ya venía de otro gran disco como es el The Bends, pero con este se superan y dejan el listón muy alto.

Suelo hablar poco de los aspectos técnicos y analíticos de los discos, las bandas y las canciones que os propongo, ya que pienso que los análisis profundos y sesudos lo tiene que hacer cada uno consigo mismo. Hay que dejar que la música fluya y nos hable de forma individual, probablemente a todos nos dirá cosas diferentes, para dejarnos luego muy cerca y en realidades paralelas.

En el caso del OK Computer ese es el único camino, escuchar y dejarse llevar, la belleza la descubriremos sin usar la vista, nos entrará por el oído y por los poros de la piel. Ahora llega el momento de proponeros un tema del álbum, y en este caso, la misión es muy difícil, yo os pondría todo el disco, pero como solo puede ser una os dejo con la pieza que cierra el disco, The Tourist.



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